No trates de impresionar a Dios

“El Señor no se deleita en los bríos del caballo, ni se complace en la agilidad del hombre, sino que se complace en los que le temen, en los que confían en su gran amor.”

Salmos 147: 10-11 (Nueva Versión Internacional)

Brío es la fuerza del caballo. Entonces el Todopoderoso no es impresionado por la fuerza de Su creación. Como lo dice éste versículo a Dios no lo podemos impresionar con las herramientas que pone a nuestra disposición, sean las que sean. Pues Él es quien da a todo su función y sus habilidades. Así como tampoco es impresionado por los dones y talentos que pueda tener el ser humano. Siendo que Él le ha dado todo cuanto tiene.

Esta es una lección que debemos tener presente, pues a nuestro Dios le agrada más que busquemos depender de Él y que confiemos en Su amor, en vez de nuestros dones y talentos. No se agrada en que tratemos de ganar Su favor haciendo gala de lo determinados y diligentes que podemos ser, sino en que nos gocemos haciendo lo que Él nos ha encomendado confiando en Su Espíritu. Nuestro Dios anhela primeramente tener una relación personal y de amor con nosotros. Y bendecirnos solamente porque nos ama. Lo Que Él quiere es amor y confianza de nuestra parte, y no que le demostremos lo fuertes que somos.

No tengas tus esperanzas en las cosas que pone Dios a tu servicio, tampoco en los dones y talentos que te ha dado. Mejor confía en tu Dios. Y Él se deleitará en ti.

Es algo sin sentido tratar de impresionar a Dios con los dones y talentos que recibiste de Él. Reconoce que todo cuanto tienes es porque Dios te lo ha dado. Y dale la gloria por ello. Ten presente que los dones y talentos que has recibido son solo herramientas para hacer la obra de Dios; y pon tu esperanza solo en tu Señor, quien te da las vitorias.

Deleita a Dios amándole y confiando solo en Él.

Autor: Richy Esparza

Escrito para: www.devocionaldiario.com

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