El Privilegio de Servir – Hefzi-ba Palomino
EL PRIVILEGIO DE SERVIR
por Hefzi-ba Palomino
“Mis ojos pondré en los fieles de la tierra, para que estén conmigo:
El que ande en el camino de la perfección, este me servirá”.
Salmo 101:6
Se dice que el Rey David fue escogido por Dios; que su nombre significa “el amado”; que tenía el corazón de Dios; a el se deben gran parte de los Salmos y a el, están dedicados varios libros y muchos pasajes en La Biblia, aun a nuestro Señor, se le llamo: Hijo de David. Finalmente, que los Salmos, compuestos por 150 himnos y oraciones, fueron utilizados por los hebreos para expresar su relación con Dios. Abarcan las emociones humanas: desde las alegrías hasta la furia, de la esperanza a la desesperación.
Para mi, personalmente es un personaje hermoso y atractivo, gran motivador y maestro, digno de admirar y emular. Su historia y sus escritos, han sido fuente de inspiración, fortaleza y valor por miles de años para los creyentes, pues a pesar de que fue un hombre grande y poderoso como significaba ser El Rey de Israel, nunca se olvidó de su origen, fue un ser humano humilde, frágil y hasta débil frente a la tentación, pero valiente cuando tuvo que admitir su pecado. No lo ocultó, antes bien, se humilló, se arrepintió y aceptó el castigo que Dios le infringió, luego se levantó y siguió adelante con su vida, aunque no pudo terminar su mayor logro, cual era el de erigir un templo para Dios, pues Dios decidió que lo haría su hijo Salomón. Un hombre que a pesar de todas las dificultades por las que tuvo que pasar, siempre mantuvo una relación estrecha e íntima con Dios y nunca dudó de su inmenso amor, su perdón, ni de su salvación.
Muchas veces me he preguntado y se que seguramente muchos de ustedes lo han hecho también: ¿existe el camino de la perfección? Bueno, el Saldo 101, dice que Si y de hecho, ya mostraba cual era el camino que deberíamos de seguir: Jesús es el Camino, El es el ejemplo de perfección que debemos de seguir, en El debemos de permanecer, de ese Camino, no nos podemos desviar, ni a la derecha ni a la izquierda.
Si leemos con detenimiento el Salmo 101, notaremos que los versículos 1 y 2, fueron escritos por la mano de David, de su corazón nació el anhelo de honrar y alabar a Dios y se deduce que era consciente que su entendimiento del camino de la perfección, no dependía de El, sino de Dios, cuando dice en el versículo 2: “Entenderé el camino de la perfección, cuando vengas a mi” y continua: “En la integridad de mi casa andaré en medio de mi casa”
El camino de la perfección es el camino de la integridad y Dios eso es lo que espera de nosotros, sus hijos: que seamos íntegros, correctos, que no vivamos con una doble moral, que imitemos y vivamos como su hijo perfecto vivió, que amemos como su hijo amó y que perdonemos como su hijo perdonó.
Pero lo que mas me llama la atención es lo que sigue: Desde el versículo 3, 4 y 5, ya no estoy segura que sean los pensamientos de David, me parece como si poco a poco sus pensamientos y las intenciones de su corazón, se fueron fundiendo con los pensamientos y el corazón de Dios y ya en el versículo 6 no me queda la menor duda: Es Dios quien está hablando.
Su contenido me hace caer en cuenta de algo grandioso: así como no somos nosotros quienes escogemos a Dios, sino Dios quien nos escoge a nosotros; tampoco somos nosotros quienes decidimos servir a Dios, es El, quien nos escoge para su servicio y cuando es El quien nos llama, nos encuentra, nos escoge y nos permite servirle, es porque es Su Voluntad hacerlo. Velemos nosotros pues, por hacer bien nuestra tarea, pues el Señor tiene sus ojos sobre la tierra y sobre los fieles de la tierra, donde estamos tu y yo.
¿Entienden ahora, porque es un privilegio el Servir a Dios? Muchos son los llamados y pocos los escogidos. Cuando el Señor te llame para algún servicio, siéntete honrado. No estas sirviendo a cualquier hombre, rey o gobernante de este mundo:
Te llama para servir en la corte del Rey de Reyes y Señor de Señores.
Escrito para www.devocionaldiario.com
Muy bueno el apunte sobre el servicio. Me acabo de enterar de este sitio web y ya me anoté. De hecho es muy cierto que el servicio es importante, si cotidianamente nos dice Pablo que “Todo lo que hagáis, hacedlo de corazón, como para el Señor y no para los hombres” (Col 3:23) Es mucho más fuerte esto en el servicio. Tu reflexión me hace pensar en lo importante que es el servicio y el hacerlo bien. Pongamos un caso, cuando yo estaba en el mundo practicaba ocho horas de guitarra todos los días por pura vanagloria. Al sentir el llamado a servir en el ministerio de alabanza ¿deberé practicar menos? Como dices al final de la nota, velemos por hacer bien nuestra labor y que sea siempre nuestra meta lo gloria de Dios y no la nuestra.
Fuera de eso me ha encantado ese recalcar que haces en el perdón de Dios. David sabía que se equivocaba, pero que Dios en su infinito amor ve el corazón arrepentido.
Bendiciones