Aunque tengamos defectos el Rey nos llama – Juan Carlos Aguilera
Aunque tengamos defectos el Rey nos llama
por Juan Carlos Aguilera Cedeño
“Y moraba Mefi-boset en Jerusalén, porque comía siempre a la mesa del rey; y estaba lisiado de ambos pies.”
2 Samuel 9:13
En momentos pensamos que la vida no es justa para muchas personas y en muchas ocasiones cuestionamos a Dios por el hecho de ver injusticia a nuestro alrededor, y en ocasiones en nuestra vida de cristiano también tendemos a Juzgar a Dios por algunas cosas que nos pasan y pensamos que se le escapo de las manos y por ende nos quejamos ya que no comprendemos el ¿por qué? de las cosas que atravesamos y en momento que padecemos.
Comúnmente he visto a cristianos que en sus comienzos parecen súper hombres y mujeres que creen tener el mundo en sus manos por la sensación que da la salvación de nuestro Señor, ya que cuando estaban muertos en delitos y pecados él les dio vida, pero al pasar del tiempo sienten que las promesas del Señor son extremadamente grandes para que las puedan alcanzar y por lo tanto le creen al pecado que los cautiva y les hace estar preso.
La historia de Mefi-boset llamó mi atención e interés ya que trata de un niño que estaba lisiado de los pies y cuando tenía cinco años quedó huérfano ya que su padre había muerto en la guerra contra los filisteos, la nodriza cuando oyó la noticia tomó al niño y huyó apresuradamente y en el camino el muchacho se le cayó y quedo cojo. 2 Reyes 4:4
Lo que me llama la atención de la historia de Mefi-boset, es que desde niño venia teniendo problemas y aun podemos pensar que no sería fácil crecer con los prejuicios de tener los impedimentos que el tenia y que por más que quisiera nunca podría ser como los demás niños y a la medida que va creciendo se da cuenta que menos puede ser como los jóvenes de su época y vivir escuchando a personas que lo menosprecian por tener esos defectos físicos, le sería más duro que su misma enfermedad.
Creo que muchos de los que nos acercamos a Jesús de alguna manera nos vemos reflejados en Mefi-boset, y me preguntaras ¿en qué? Yo tengo todos mis órganos bien y no nací con defectos notables como él, podría ser cierto que no tengas esos defectos pero cuando fracasas y sientes que no está en tus manos mejorar y lo único que ves y oyes son las palabras de las personas que te dicen lo mal que has hecho las cosas y dejas de creerle a Dios por creer a lo que el enemigo quiere que tu creas ¡no sirves para nada!
Sabes, después de muchos años que probablemente Mefi-boset (que quiere decir el Avergonzado) pensó que nació desdichado y moriría así, todo cambio de repente, lo inimaginable aconteció, que la persona que el temía y el cual su vida estaba en sus manos, de repente cree que es conveniente hacer misericordia con alguien de la familia de su padre y ¿a que no saben a quién le dieron la honra de comer siempre en la mesa del Rey? Si, el mismo el hombre lisiado y cojo de la familia de Saúl el cual se llamaba Mefi-boset. 2S 9:13
Los defectos de ese hombre siempre se recordarán, pero el hecho de comer en la mesa del Rey le dio seguridad y aliento, ya no hay lugar para tristeza y nadie más nos podrá avergonzar jamás porque está cerca del Rey.
Quería compartir esta historia en mis propias palabra ya que siempre hay momentos en los que sentimos que todo está mal y que por nuestras limitaciones nunca vamos a alcanzar lo que deseamos y pasamos toda nuestra vida intentando solamente sobrevivir como lo hacía Mefi-boset pero llego el día que paso lo inimaginable, tuvieron misericordia de él y no fue cualquiera persona sino el Rey.
Sabes en una ocasión el Señor le dice al pueblo de Israel de que en tiempo aceptable te he oído y en día de salvación te he socorrido y el apóstol haciendo mención de esa profecía decía que ya había llegado el día aceptable y el día de salvación para nuestras vidas, ya el Señor nos dio vida a nosotros cuando aun estábamos muertos en nuestros delitos y pecados, debido a que por gracia somos salvos y esa salvación no es por una habilidad que tengamos sino que es por fe y esa fe es un don de Dios.
Hermano no desfallezcas porque somos hechura de Dios y por ende todas las cosas que hemos hecho y estamos por hacer es porque Dios las preparo de antemano para que andemos en él. No le hagas caso a nadie que te quiera tener en poco ya que tus estas en la mesa del Rey (ya estamos sentados en lugares celestiales en Cristo Jesús).
“Estoy seguro que Mefi-boset no tuvo más temor después de estar sentado día a día en la mesa del rey; tu tampoco tengas miedo porque donde te lleve la mano de Dios su gracia también te cubrirá ya que eres de él.”
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Escrito para Ministerio Vivo Para Cristo y Devocional Diario.com