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¿Y tu cabecera? – Lady Ruiz

¿Y tu cabecera? – Lady Ruiz

admin febrero 07, 2010 Lady Ruiz, Reflexión 0 Comentarios

¿Y TU CABECERA?

por Lady Ruiz

“Salió, pues, Jacob de Beerseba, y fue a Harán. Y llegó a un cierto lugar, y durmió allí, porque ya el sol se había puesto; y tomó de las piedras de aquel paraje y puso a su cabecera, y se acostó en aquel lugar.”

(Génesis 28:10-11)

Leyendo este pasaje en la Biblia estuve largo tiempo pensando en algo que llamó mucho mi atención y fue el hecho de ¿Por qué una cabecera de piedra? digo ¿a quien se le ocurre cosa semejante? si no hay que poner bajo nuestra cabeza pues sencillo, acomodamos nuestro brazo o sencillamente no colocamos nada y de igual manera ¡lograremos descansar! bueno es lo más lógico desde mi punto de vista…

Sin embargo y luego de dar tantas vueltas me involucré en lo que se puede sentir cuando colocas tu cabeza apoyada sobre piedras y sinceramente que es incómodo… no tardaríamos mucho para buscar estar cómodos y lograr un descanso apacible.

Esa es la verdadera razón de la enseñanza que nos muestra Jesús, que siempre buscamos “COMODIDAD”, Nos desgastamos diariamente para vivir cómodamente y cuando la incomodidad llega a veces no la resistimos y clamamos de una manera y otra a fin de que El Todopoderoso nos regale uno de sus incontables Milagros.

La verdad que creo además que todos hemos sentido es que no siempre nos llega ese tan esperado Milagro…. y llegamos en algún momento a sentirnos frustrados, no quiero decir que Dios sea incapaz de regalarnos ese milagro, lo que pasa es que Él también desea que vayamos más allá, él sabe que tenemos grandes capacidades, pero por esa comodidad nos esforzamos poco.

Si seguimos meditando en este delicioso pasaje bíblico encontramos que Jacob soñó…. ¡Ahhh! y que hermoso sueño, imagino a Jacob incómodo sobre estas piedras que sostenían su cabeza y quizá el dolor que le pudo haber causado, pero esto ¡no le impidió que soñara!

Muchas de nuestras situaciones son incómodas y difíciles de soportar, pero si el resultado no es lo que esperabas sigue, esfuérzate y sé valiente no desmayes, muy probablemente necesites estar en este momento así por que Jesús está formando tu carácter.

Sigue diciendo el pasaje: “y he aquí una escalera que estaba apoyada en tierra, y su extremo tocaba en el cielo; y he aquí ángeles de Dios que subían y descendían por ella. Y he aquí, Jehová estaba en lo alto de ella, el cual dijo: Yo soy Jehová, el Dios de Abraham tu padre, y el Dios de Isaac; la tierra en que estás acostado te la daré a ti y a tu descendencia, te extenderás al occidente, al oriente, al norte y al sur; y todas las familias de la tierra serán benditas en ti y en tu simiente.

Fíjate bien, Jacob esta recostado con su cabeza sobre una piedra., soñó y Dios le habló diciendo la tierra en la que estas acostado te la daré, bastó la incomodidad de una piedra para soñar y hacerse partícipe a su herencia, “a tierra en que estas acostado te la daré…”.

Luego dice: “He aquí, yo estoy contigo, y te guardaré por dondequiera que fueres, y volveré a traerte a esta tierra; porque no te dejaré hasta que haya hecho lo que te he dicho”.

Cuando sobrepasamos las dificultades, cuando logramos pasar las pruebas que nos llegan, cuando podemos levantar nuestro brazo en victoria luego de haber sido afligidos, el botín de esa victoria no se compara en nada al sufrimiento que padecimos.

También dice que no nos dejará solos, no te dejaré hasta que haya hecho lo que te he dicho. Dios no nos da cargas que no podamos soportar, Él nos da lecciones de vida sacando a flote nuestras capacidades, además de pulir nuestro Espíritu; Una persona que se estanque con las aflicciones es alguien que difícilmente puede soñar, y le es mucho más difícil le será vencer.

Siempre ayuda mantener en mente un TODO LO PUEDO EN CRISTO QUE ME FORTALECE (Filipenses 4:13), Cristo es nuestra fuerza para seguir, Él no está diciendo, tranquilo, duerme tranquilo que yo todo lo haré por ti, no es así, tenemos que permitirnos soñar en medio de la aflicciones y vencer con la Fuerza de Cristo en nosotros.

Al finalizar el sueño de Jacob, despertó e hizo ¡voto!, ese Voto también debe existir en nosotros, ese deseo de demostrar nuestro agradecimiento hacia Él, el hecho de servirle además de dar lo que le corresponde, Poco es comparado a lo que nos da de su mano.