No Matarás – Maryuris Torres Urueta

NO MATARÁS

por Maryuris Torres Urueta

“No matarás” (Deuteronomio 5:17) es uno de los mandamientos de Dios. Por tanto, no tenemos derecho, de quitarle la vida a ningún ser humano, no tenemos derecho de quitarnos la vida nosotros mismos, porque el único que tiene autoridad sobre nuestra vida es aquel quien nos la dio. Dios nos dio la vida y el es el único que sabe en que momento empieza nuestra vida y cuando se termina.

Nosotros somos su creación, por lo tanto somos exclusividad de él y no somos dueños de nuestras vidas, nuestro deber es dirigirnos correctamente y vivir conforme a la voluntad de Dios.

Pero para muchas personas, hoy en día la vida no tiene ningún valor. Hay personas que matan tan fácilmente como si fuera un negocio. Reciben un pago por asesinar a alguien como si fuera cualquier trabajo, sin tener el más mínimo respeto por la vida ajena. Como también, un ladrón por el hecho de quitarle algo a una persona, no le interesa quitarle la vida con tal de obtener lo que quiere.

En muchos hogares, se ve a diario por los noticieros, que el esposo mató a la esposa por celos, hermanos que por discusiones que no tienen ningún sentido terminan quitándose la vida. Muchos hasta a sus propios padres han matado, madres que matan a sus bebes porque para ellas es la forma mas fácil de deshacerse de ellos. Es entonces cuando nos preguntamos, ¿qué es lo qué pasa?

NO MATARAS es uno de los mandamientos, entonces, ¿por qué lo hacen? Por qué quitare la vida a alguien si es lo más valioso que tenemos. La vida es el regalo más maravilloso que Dios nos ha dado.

A veces pensamos que para matar solo necesitamos un arma o quitarle la vida a alguien, pero también hay otra forma de matar. Cuando herimos los sentimientos de alguien, cuando nos pasamos la vida, ofendiendo a nuestro prójimo, cuando pensamos que somos los mas inteligentes, que nos las sabemos todas, cuando humillamos y maltratamos, esa es otra forma de matar.

Cuando tú hombre, maltratas a tu esposa haciéndola sentir que no vale nada. Cuando la usas sin importarte sus sentimientos, cuando piensas que porque es tu esposa, tienes el derecho de humillarla. Cuando le dices palabras que la hieren, cuando la golpeas, sin piedad, y después la utilizas como si fuera un trapo, sin tener el mas mínimo respeto y consideración por ella.

Esa, es una forma de matar, porque matas sus sentimientos, matas su amor propio, la haces sentir que no vale nada, y en verdad me duele porque sé que hay millones de mujeres que tienen el corazón muerto de tanto dolor y sufrimiento causado, por quien más las debe amar y respetar. La esposa es una ayuda idónea, para el hombre, es compañera, es amiga, es confidente, es un complemento del hombre, porque en verdad que harían los hombres sin las mujeres.

Dios la creo, para que fuera su compañera, porque él vio que no era bueno que el hombre estuviera solo (y dijo Jehová no es bueno que el hombre este solo; le haré ayuda idónea para él. Génesis-2-V-18); (entonces Jehová Dios hizo caer sueño profundo sobre Adán, y mientras este dormía, tomó una de sus costillas y cerro la carne en su lugar. y de la costilla que Jehová Dios tomó del hombre, hizo una mujer, y la trajo al hombre. Y dijo entonces Adán: esto es ahora hueso de mis huesos y carne de mi carne; esta será llamada varona, porque del varón fue tomada. Por tanto, dejara el hombre a su padre y a su madre, y se unirá a su mujer, y serán una sola carne (Génesis-2:21-24)

Todo hombre necesita de su mujer, y aún es más hermoso si a esa mujer que tanto te sirve tú la tratas con amor y con respeto (vosotros maridos, igualmente, vivid con ellas sabiamente, dando honor a la mujer como vaso más frágil (1 Pedro3:7). La mujer es un ser delicado, por lo tanto merece que la traten con mucho cuidado. El señor la compara como un vaso frágil, que hay que tomarlo con mucho cuidado para no quebrarlo.

Otra forma de matar, es de igual forma cuando al contrario del hombre es la mujer, la que tiene un mal comportamiento con su esposo, cuando no cuida bien su hogar, cuando descuida a sus hijos. No hay mas forma de matar el corazón de un hombre, cuando su esposa le es infiel, le matas su hombría, es la forma más humillante para un hombre. Saber que su esposa lo engaña con otro hombre, le matas su razonamiento, su confianza, y destruyes completamente sus sentimientos. Nunca una mujer debería de comportarse de esa forma, eso no esta aprobado por Dios y es una forma de matar el hogar que es una institución formada y creada por Dios, por lo tanto es sagrado.

También otra forma de matar, es cuando hacemos sufrir a nuestros padres por nuestro mal comportamiento, cuando somos desobedientes a ellos, no hay peor sufrimiento para una madre, es ver a sus hijos en mal camino, como en el uso de las drogas, cuando tienen a sus hijos en una cárcel, cuando son borrachos, madres que no duermen en las noches pensando que las van a llamar para decirles que mataron a sus hijos, porque ellos andan en un mal camino.

Por eso, yo los invito queridos hermanos para que hagamos con nuestras familias un altar todas las noches y juntos le pidamos a nuestro Dios que nos proteja de toda asechanza del enemigo. Que nos libre del mal, cantándole alabanzas y exaltando su santo nombre. Y no nos olvidemos que nuestro hogar debe ser dirigido por nuestro Dios para que él con su amor y su misericordia nos libre de todo mal.

“Y no temáis a los que matan el cuerpo, mas el alma no puede matar; temed más bien a aquel que puede destruir el alma y el cuerpo en el infierno”. (Mateo 10:28)

Compártelo en Facebook