Un héroe es consciente de que fue su héroe, quien lo hizo triunfar – Marisela Ocampo Otálvaro
Un héroe es consciente de que fue su héroe, quien lo hizo triunfar
Un héroe sabe cuál es el reto que quiere alcanzar, tiene claro que para alcanzar su reto debe enfrentar obstáculos que pretenderán impedirle el logro de sus objetivos. Un héroe es consciente de que tiene que estar preparado para cualquier cosa que suceda en el trayecto de su conquista. Un héroe no tira la toalla ante la primer dificultad que se le presenta en el camino. Un héroe tiene la convicción de que fallar no es fracasar, por el contrario, entiende que cada falla es una oportunidad para hacer las cosas mejor, un héroe nunca fracasa, un héroe siempre se levanta de sus caídas y vuelve a empezar.
Cada vez que se presentan dificultades en el camino es fácil pensar en abandonar el reto porque nuestras emociones fluyen y los malos pensamientos empiezan a posarse en la mente pretendiendo cambiar el rumbo del camino que ya estaba trazado; sin embargo, un héroe toma la determinación en una situación como estás de continuar la batalla, de no perder su identidad, de seguir persistiendo hasta comprender que lo sucedido simplemente fue una prueba de fuego por la que todos en algún momento de la vida tenemos que atravesar.
Una persona se hace héroe si tiene claro quién es su héroe a seguir y el mejor modelo que podemos encontrar es Jesucristo, el único que merece el digno reconocimiento de ser el mejor de los líderes:
Un héroe sabe de quién depende
Todo héroe necesita de alguien experto que lo direccione en sus caminos, necesita de alguien sabio, inteligente y con poder. Necesita de alguien que lo motive y lo levante cuando caiga, y sobre todo alguien que sea ejemplo y digno de imitar, ese alguien es Jesús. Un héroe entrega desde el principio sus planes y sus proyectos al Señor, porque Él es el único que puede llevarnos al éxito de cada una de las metas que queremos lograr.
Pon en manos del Señor todas tus obras, y tus proyectos se cumplirán. Proverbios 16:3 (Nueva Versión Internacional).
Un héroe nunca pierde su identidad
Un héroe sabe quién es, sabe de dónde viene y sabe para dónde va. Un héroe tiene la convicción de ser hijo de Dios, sabe que Él fue quien lo creó, sabe que Él es su origen y sabe que Él es su dirección; a donde Él nos lleve es donde debemos estar y hacer lo que Él nos pide, es lo que debemos hacer.
Mas a cuantos lo recibieron, a los que creen en su nombre, les dio el derecho de ser hijos de Dios. Juan 1:12 (Nueva Versión Internacional).
Es fácil perder la identidad en Cristo cuando estamos en medio de una crisis, pero un héroe nunca olvida quién es su creador, su protector, su defensor, su respaldo y su salvador. Dios nunca deja sólo a un héroe en la batalla, Él siempre está dispuesto a rescatarnos del hoyo en el que caigamos, nos levanta y nos fortalece para continuar en nuestro camino. Un héroe tiene claro que está con el mejor y que ninguna crisis es más fuerte que Él.
Sólo nos queda decir que, si Dios está de nuestra parte, nadie podrá estar en contra de nosotros. Romanos 8:31 (Traducción en Lenguaje Actual).
Un héroe valora las dificultades
Un héroe convierte las dificultades en oportunidades para salir adelante, no las ve como su enemigo, las ve como una bendición, como una llave que abrirá nuevas puertas, más grandes y llena de mejores posibilidades para lograr el reto. Son las situaciones difíciles las que sacan lo mejor del héroe, son las dificultades las que nos acercan al triunfo. Un héroe reconoce que las dificultades en el camino al éxito, le darán mayor valor a la victoria.
Sabemos que Dios va preparando todo para el bien de los que lo aman, es decir, de los que él ha llamado de acuerdo con su plan. Romanos 8:28 (Traducción en Lenguaje Actual).
Un héroe se alimenta de las crisis, las lágrimas se convierten en combustible y la presión fortalece el hambre y la sed de triunfar. Un héroe sabe que está con Cristo y que todo en Él, lo conseguirá.
Todo lo puedo en Cristo que me fortalece. Filipenses 4:13 (Reina Valera 1960).
Un héroe siempre pide sabiduría para actuar
Un héroe no se apoya en su propio entendimiento, siempre se asesora para tomar las mejores decisiones. La mayoría de los fracasos surgen de tomar decisiones a la ligera, basados en las emociones y los impulsos, y el actuar de esta forma siempre trae desilusión. Nuestra falla es pretender hacer las cosas a nuestra manera sin tener en cuenta los planes que Dios tiene para cada uno de nosotros.
Actuar sin la dirección de Dios, es como viajar por el mundo sin un destino, cuando no invitamos a Dios a nuestra vida, la vida se convierte en una ruleta de la suerte.
Si a alguno de ustedes le falta sabiduría, pídasela a Dios, y él se la dará, pues Dios da a todos generosamente sin menospreciar a nadie. Santiago 1:5 (Nueva Versión Internacional).
Un héroe se esfuerza
Un héroe reconoce que tiene que dar lo mejor de sí mismo, sabe que tiene que sacrificarse y hacer un esfuerzo adicional para lograr su reto. Un héroe no se conforma, siempre está dispuesto a crecer y madurar en el transcurso de su caminar. Reconoce que cada día que pasa es una oportunidad para ser mejor y poner lo mejor de su parte en la obra que quiere alcanzar. Un héroe lucha por sus sueños y en cada lucha deja su mejor esfuerzo.
Luego, David le dijo a Salomón:
¡Sé fuerte y valiente! ¡Cumple con tu trabajo y construye el templo de Dios! ¡No tengas miedo ni te desanimes, porque Dios siempre estará contigo! Él no te dará la espalda ni te abandonará. 1 Crónicas 28:20 (Traducción en Lenguaje Actual).
Un héroe conserva su humildad
Cuando un héroe llega a la meta sabe perfectamente quién lo acompañó, quién lo ayudó, quién lo respaldó. Frente al triunfo siempre conserva la humildad, no se olvida de dónde viene y no se olvida quién lo ha llevado a la meta. Un héroe sabe que su logro influenciará a muchos de manera positiva, pero también sabe que dependiendo de la actitud con que asuma su triunfo, su celebración será compartida o simplemente un triunfo más del cual sólo él se sentirá orgulloso. Un héroe hace partícipe a los demás de su triunfo con la intensión de motivarlos a hacer lo mismo.
Sean humildes, amables y pacientes, y bríndense apoyo, por amor, los unos a los otros. Hagan todo lo posible por vivir en paz, para que no pierdan la unidad que el Espíritu les dio. Efesios 4:2-3 (Traducción en Lenguaje Actual).
Un héroe sabe que el propósito de su triunfo es que sirva de testimonio para aquellos que han perdido la esperanza de lograr sus sueños, un héroe no se jacta y se vanagloria de la victoria que el Señor le ha permitido alcanzar. Un héroe es consciente de que fue su héroe “Jesucristo”, quien lo hizo triunfar.
No nos hagamos vanagloriosos, irritándonos unos a otros, envidiándonos unos a otros. Gálatas 5:26 (Reina Valera 1960).
Tú llevas a un héroe dentro de tu corazón, reconócelo, descúbrelo y empieza a disfrutar de las victorias que tendrás en el Señor, no te conformes con lo que has vivido, tienes la oportunidad de dejar una huella diferente en los corazones de aquellos que te conocen, empieza a actuar como el héroe que eres, conforme el modelo de heroísmo que encontramos en nuestro Señor Jesucristo.
¡Gracias señor Jesucristo, tú eres nuestro gran héroe!
Autora: Marisela Ocampo Otálvaro
Escrito para www.devocionaldiario.com
Hermoso mensaje . Bendiciones