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Crónica de una prueba no anunciada – Hefzi-ba Palomino

Crónica de una prueba no anunciada – Hefzi-ba Palomino

admin agosto 10, 2013 Hefzi-ba Palomino, Luis Caccia Guerra 0 Comentarios

CRONICA DE UNA PRUEBA NO ANUNCIADA.

“¿Quién nos apartará del amor de Cristo? ¿La tribulación, o la angustia, la persecución, el hambre, la indigencia, el peligro, o la violencia? Así está escrito: «Por tu causa siempre nos llevan a la muerte; ¡nos tratan como a ovejas para el matadero!”

Romanos 8:35-36

Nueva Versión Internacional (NVI)

Seguramente en este momento hay alguien que tiene que lidiar con alguna situación difícil y es que las pruebas de Dios no son como los test de la escuela, que tú sabes que día y a qué hora tienes que presentarlos; las pruebas de Dios, llegan sin avisar, de repente, en el momento que menos te lo esperas y creo que Dios así lo hace porque precisamente quiere saber lo que hay en nuestro corazón, como reaccionamos y como enfrentamos los problemas, muchos de ellos consecuencias de nuestras decisiones equivocadas y es en esos momentos donde tenemos que mostrar quienes somos realmente, pues a Dios no lo podemos engañar, ni nos podemos justificar; El conoce nuestro corazón y discierne nuestros pensamientos y permite que nos equivoquemos, para que aprendamos y entendamos el camino en el que debemos de andar y corrijamos lo que no esté bien.

Nadie ha dicho que la vida cristiana fuera fácil, es más, algunos creen que después de convertirse todo su mundo se voltio de cabeza y hasta creen que su vida ha empeorado, pero esto tampoco es así, lo que realmente sucede es que Dios está haciendo – Reingeniería – en nuestra vida, está poniendo todo en el orden en que debe estar, está derribando los muros de mentira en que construimos nuestra vida y la está reconstruyendo de nuevo, empezando de ceros, sobre nuevas bases, sobre el fundamento que es la Verdad, que es Jesucristo.

Cualquiera que sea la situación con que tengamos que lidiar, es difícil y es única, especialmente diseñada para la persona que lo necesita, también puede ser dolorosa en diferentes grados, tanto emocional como física o mentalmente, pero Dios es Fiel y no solamente no nos deja solos, sino que nos tiene agarritos de sus manos, de donde nadie puede arrebatarnos, nos da herramientas para que luchemos y seamos victoriosos En Cristo y podemos contar con Su Palabra, que es viva y eficaz y hace lo que Dios quiere que ella haga en nuestra vida.

Por eso es importante que permitamos que Dios escriba Su Palabra, en nuestra mente y nuestro corazón, pues es en los momentos de prueba, cuando Su Palabra, da el fruto que tiene que dar, cuando recordamos sus promesas, sus versículos, su amor, su fidelidad, su misericordia y nos fortalecemos en Su Presencia y en Su Espíritu. Jesús es el Pan de Vida, el alimento y entre más nos alimentemos de su palabra, más probabilidades tendremos de salir airosos y victoriosos de cualquier situación.

Ahora bien, que propósito puede tener para Dios una prueba o una situación que El permite? Yo me atrevo a especular un poquito y diría que Él quiere medir:

Nuestro entendimiento de La Biblia, su palabra y para eso, hay que leerla, conocerla, memorizar versículos y saber cuáles invocar en el momento de necesidad y de angustia.
Nuestra fe, saber que tanto creemos y confiamos en El. Hablando humanamente, es triste cuando alguien a quien amamos no confía en nosotros, no nos cree y no tiene confianza en lo que hacemos o decimos, cuanto más se sentirá Dios, que nos creó a su imagen y semejanza, si nos autodenominamos cristianos, pero nos quedamos cortos en la fe, nos desanimamos y nos abatimos ante los problemas?
Nuestra humildad, pues el orgullo y la arrogancia, es un pecado horrible, mientras que un corazón contrito y humillado ante su presencia, es un corazón dispuesto a reconocer sus errores y equivocaciones y a no repetir eternamente los mismos errores.
El amor que le tenemos a Él y que tenemos para nuestros semejantes, aun para nuestros enemigos, pues todo el mundo tiene enemigos, aunque no sean declarados abiertamente como tal.
Nuestra obediencia. Estamos siendo obedientes a su palabra y a su voluntad todos los días de nuestra vida o solo nos acordamos de Dios los Domingos cuando vamos a la Iglesia?
Nuestras promesas. Dios es fiel con nosotros y también quiere que nosotros seamos fieles a las promesas que hacemos, que cumplamos con lo que decimos y que no usemos su nombre en vano, haciendo promesas que nunca cumplimos.

Todo esto parece realmente muy difícil de cumplir si queremos hacerlo en nuestra propia fuerza, pero si consideramos que mayor es el que está en nosotros que el que está en el mundo, realmente no lo es tanto; recordemos que Cristo se ha ofrecido a cargar nuestra cruz, entreguémosle pues nuestras cargas y carguemos la de él, que es ligera; también ha dicho, yo soy la vid verdadera y ustedes los pámpanos, si permanecen en mí y yo en ustedes y el amor permanece, entonces darán mucho fruto; esta es la clave – permanecer en El, no alejarnos de su presencia, su palabra y su amor si permaneces en El, reconoces tus faltas, su amor, cubrirá multitud de faltas.

Para poder decir: “Todo lo puedo en Cristo que me fortalece: tenemos que permanecer en Cristo, porque separados de Él, nada podemos hacer y si Dios con nosotros, quien contra nosotros? No importa la dimensión del problema, permanezcamos en Cristo, sumergidos en Su Presencia y su amor, recuerda que para los que aman al Señor, todas las cosas nos ayudan para bien.