INSPÍRATE DE LAS HORMIGAS

por Estephany Cordova V.

¡Vamos joven perezoso fíjate en la hormiga! ¡Fíjate en cómo trabaja, y aprende a ser sabio como ella! La hormiga no tiene jefes, ni capataces ni gobernantes, pero durante la cosecha recoge su comida y la guarda!

Proverbios 6:6-8

¿Cansado(a)? quizás los ojos te pesan porque te niegas a ver lo que hay más allá. Quizás te has aferrado a esa palabra que alguien por ahí te dijo y aunque dentro de ti Dios te dice que no es verdad para ti es más fácil creerlo que renovar tu mente. ¿Sabías que las manos que hasta el día de hoy te acompañan se mueren de ganas por trabajar? ¿Sabías que esas fuertes piernas fueron diseñadas por el majestuoso para que tú mi querido amigo (a) corra? Entonces, la pregunta del millón de dólares es ¿Por qué sigues sentado resignado a una vida mediocre? ¿Por qué continúas pensando que tu destino es ese que muchos ya te predestinaron?

¿Desde ya eres creación hermosa porque Dios te creó, él pensó que color de ojos tendrías, él pensó en la estatura que ahora te hace ser tú. Eres hermoso de principio a fin. Entonces ¿Por qué no lo crees? En ti se refleja la sabiduría de Dios. Eres diseño inigualable. ¿Por qué te has condenado a ser un ser insufrible? ¿Qué haces llorando? No pierdas más el tiempo, tienes un propósito que cumplir y Dios mi querido hermano(a) confía en ti. Si tienes a Dios de tu lado, dime quien contra ti. Nadie. ¡ÁNIMO! Nadie dijo que sería fácil y si has pensado no mover ni un dedito para el cambio, las cosas se tornarán aún más difíciles. Sé sabio(a) como nuestras amiguitas las HORMIGAS. Ellas son un ejemplo de trabajo. Ahora sí que no puedes excusarte en tu tamaño, porque las hormigas si mis ojos aún ven bien no llegan ni al medio metro.

Esfuérzate, ya deja de solamente soñar. Recuerda este versículo:

“Todo esfuerzo vale la pena y el que mucho habla y no trabaja se quedará en la pobreza”

Vamos hermano(a) Todo en esta vida es posible si tan sólo puedes creerlo. Habla con el padre, derrama tu corazón a él y pídele que renueve tus fuerzas y fe. El Señor es bello, amoroso, detallista y no es nada indiferente. Él conoce tus necesidades pero nos dio libertad para que lo amaramos, él nunca te obligará a eso, y por lo tanto tampoco tomará parte de tus problemas, dificultades si no tu no le haces participe de ello. El respeta la libertad que te dio pero créeme que le duele que sigas desperdiciando el tiempo creyendo que todo está perdido. Si de algo puedo dar fe es que mientras se está vivo, nada está perdido, al contrario está ganado.

Ten un hermoso día. Empieza una nueva página del libro de tu vida. Echa fuera todo ese pesimismo y resignación y empieza otra vez. Y por último hermano (a) cada vez que pienses que no lo lograrás detente y mira a nuestras amigas las hormigas y copia el buen ejemplo.

Todo esfuerzo vale la pena. Nunca cosecharás nada que no hayas sembrado

Escrito para www.devocionaldiario.com

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