Cada día – Enrique Monterroza
Cada día
Hoy reflexionaba sobre la misericordia de Dios sobre mi vida, esa misericordia que provoca que Dios no me de lo que merezco sino que me perdone cada mañana.
Me doy cuenta cómo muchas veces pierdo de vista el valor que tiene esa misericordia que me tendría que llevar a valorar más y más lo que Dios hace por mi.
Parece ser que a veces estamos tan acostumbrados a esa misericordia que ya ni siquiera la valoramos, sino que la vemos como algo normal, cuando en realidad tiene un enorme valor.
La Biblia dice:
“¡el fiel amor del Señor nunca se acaba!
Sus misericordias jamás terminan.
Grande es su fidelidad;
sus misericordias son nuevas cada mañana.”Lamentaciones 3:22-23 (Nueva Traducción Viviente)
¿Te das cuenta de lo que esto significa?, ¿Te das cuenta lo bendecidos que somos al contar con su amor, son su fidelidad, pero sobre todo con su misericordia?
¿Cómo estamos valorando lo que Dios es y hace por nosotros?, ¿De que forma estamos demostrando lo agradecidos que estamos con Él?
¿Te das cuenta que a veces en lugar de agradecer cada día a Dios por su misericordia lo que hacemos es reclamar, quejarnos, dudar y hasta enojarnos con Él?
¿Qué puedo reclamar a Dios yo?, ¿Qué valor tienen mis reclamos si Él me ha dado más de lo que me merezco?, ¿Cómo puedo quejarme si Dios ha sido infinitamente fiel?, ¿Cómo voy a dudar de sus planes si ellos siempre son perfectos?, ¿Por qué he de enojarme con el dador de vida?
Este día solo tengo palabras de agradecimiento, no quiero pedir nada, no quiero reclamar nada aun cuando Él me halla prometido algo, porque reclamar para mi es cómo que creer que merezco algo cuando en realidad Dios me ha dado más de lo que realmente merezco.
En lugar de reclamar prefiero esperar porque si Él ha prometido seguro cumplirá, no hay porque presionar a Dios, no hay porque apurarlo, Él actúa en tiempos perfectos sin necesidad de mi presión.
Cada día tendría que ser una oportunidad simplemente para agradecer a Dios por lo que ha hecho, que nuestra vida sea un reflejo de agradecimiento por su misericordia, cada día debemos recordar que si estamos acá es porque Él ha tenido misericordia con nosotros.
Sus promesas se cumplirán, tus necesidades serán cubiertas, su fortaleza vendrá a tiempo, su sabiduría te inundará, pero lo más importante de todo esto no es lo que obtendrás, sino lo que ya has obtenido: Su misericordia renovada diariamente sobre tu vida.
¡Gracias Dios porque cada día renuevas sobre mi vida tu misericordia!
Autor: Enrique Monterroza
Escrito originalmente para www.destellodesugloria.org
Autorizado para publicarse simultáneamente en: www.devocionaldiario.com – www.enriquemonterroza.com y http://reflexionesydevocionales.blogspot.com
Amén, le creo a Dios, porque no es hombre para mentir. Bendiciones hermano!
Tendríamos que dar gracias cada día en cada segundo de nuestra vida
por la misericordia que Dios derrama sobre nosotros.Todo lo que somos se lo debemos al Señor,gracias por la fuerza,y fortaleza que he recibido en momentos de dolor y tristeza,me he aferrado a Tú misericordia porque sin ella no es fácil salir adelante,me siento enriquecida porque Tú Presencia habita en mi corazón,eres mi luz,mi refugio,y mi protector,me acompaña en momentos de soledad.
Te doy gracias porque Tú fidelidad y misericordia me llenen siempre de Tú gracia!.Confío en Tú Divina Misericordia,alabado seas por siempre Señor,cada día te amo más.Buscar al Señor y comunicarnos es toda una bendición y gozo espiritual y que nos da vida.Saludos para todos los que hacen posible estos devocionales que nos alienta a seguir creciendo en la fe.Gracias de todo corazón.
muy buenos… que asi sea
Demos gracias a Dios por cada día que nos regala lleno de su misericordia y su presencia, sin la cual no nos sentiríamos hijos de
su Reino.Cada día que amanece es una nueva oportunidad que Dios nos da para empezar de nuevo,para mi sentir a Dios en mi corazón es como el aíre que respiro si me falta es como cuando estamos malos.
Y tenemos que acudir al médico para que nos cure,pues creo que el alimento más necesario para sanar nuestras faltas y que nuestra alma quede limpia de todo mal es amar a Jesús y ofrecernos de lleno en cada Eucaristía.Ojalá que todos los días podamos dar esas gracias tan necesarias para agradecer al Señor la vida que nos ha dado,y que dio
su vida a cambio de nuestra salvación.Estos devocionales me llenan de orgullo y me hace sentir la necesidad de poder hacer mi reflexión,no
sé si lo consigo,pero tengo la completa seguridad que lo que hago en
esta vida es todo con amor,y que siempre deseo lo mejor al prójimo.
¡Quien ama a Cristo tiene que saber dar amor a quien no lo tiene!.
ME PARECIÓ MUY BUENO AGRADECIDA CON DIOS X SU PALABRA Y SU AMOR.