La cáscara de la fruta – Daniel Orduña

La bendición escondida

por Daniel Orduña

Porque mis pensamientos no son vuestros pensamientos, ni vuestros caminos mis caminos, dijo Jehová. Como son más altos los cielos que la tierra, así son mis caminos más altos que vuestros caminos, y mis pensamientos más que vuestros pensamientos. Isaías 55:8-9.

A veces estamos en situaciones que se nos hacen muy amargas. Pero esas situaciones a veces son como frutas. Muchas frutas primero tienen la cáscara, que es amarga y no nos gusta pero después viene la pulpa que es muy dulce y deliciosa. Así son las situaciones. Lo primero que viene es la cáscara, que es amarga y dura.

La cáscara son situaciones difíciles para nosotros, puede ser cuando nos quedamos sin trabajo, la economía, la salud, la familia ó cuando cambiamos de lugar de residencia, como me sucedió a mí apenas.

Nosotros no entendemos el por qué de esos duros momentos pero Dios, que ve más allá de lo que nosotros podemos, sí. El no ve la cáscara, El ya esta viendo la pulpa dulce y suave de la fruta, y si nosotros nos rendimos en esos difíciles momentos entonces nunca podremos ver, ni saborear la pulpa.

A veces Dios no permite que tenga ese trabajo o aquello que tanto deseaba por que eso no es para nosotros, no es lo que nos conviene. Pero si resistimos en Dios esas situaciones y llegamos a la pulpa, Dios nos puede dar un trabajo mejor, un lugar mejor, nuevos amigos, una mejor relación con El, etc. Pero si la cáscara de la situación es muy dura y tú crees que no la vas a poder aguantar, entrega todo a Dios por que El es el que te va a apoyar, descansa en Él y medita la palabra por que Todo lo puedo en Cristo que me fortalece. Filipense 4:13.

RECUERDA QUE NO TODAS LAS CASCARAS SON SUAVES, ALGUNAS SON DIFICILES DE QUITAR, PERO TODAS LAS FRUTAS SON BUENAS Y AGRADABLES, COMO TODO LO QUE HACE EL SEÑOR.

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Escrito para www.DevocionalDiario.com

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