Oda a mi amada – Richy Esparza

Oda a mi amada

por Richy Esparza

Yo te conozco pero aún no tienes rostro. Yo te he sentido pero aún no te he conocido. Yo he estado contigo, más aún no hemos sido presentados.

Yo te conozco desde pequeño y como mi mujer te debía potestad. Pero en el camino me desvíe y a otras muchas yo miré.

Traté de encontrarte en el mundo, traté de encontrar tu rostro allá afuera, y por poco la potestad de mi amada fue borrada.

Encontrarte era mi gran anhelo, y en ojos verdes traicioneros fui a caer. Le entregué mi corazón a una que no era; esperando encontrar a mi mujer.

Mi corazón fue astillado y con otras traté de restaurarle, más sin embargo solo a una mi corazón puede amarle.

En el camino mi Señor me puso a prueba, poniendo a otra que tenía otro tipo de potestad. Potestad de mi pasado y la gran cadena generacional.

Más sin embargo estando yo con ella, tú te enfureciste y me llamaste. Con verdadera potestad oraste al cielo, y al que siempre has amado reclamaste. Tú oración fue escuchada por tu amado, y el camino a ti y los nuestros tú marcaste.
Me he estado preparando para ti, pues tu espera quiero yo recompensarte.

He estado creciendo para ti y mostrarte el digno varón que reclamaste. Me he estado purificando para ti, y que realmente pueda yo amarte.

Tengo tanto que contarte desde de la ultima vez que pude en sueños yo mirarte.

Pido al Padre que me dé paciencia, porque mi corazón no aguantaría de nuevo yo fallarte.

Pido al Padre que te diga que no has esperado en vano, y que pronto podrás estar con tu amado.

Hoy te digo hermano, que solo hay una que a ti puede complementarte. Hoy te digo hermano que solo hay una que tu espíritu conoce; y el Padre potestad sobre ti le ha dado.

Hoy te digo hermana, que no entregues tu corazón a otro que no comparte tu gozo. Hoy te digo hermana que tu Padre tiene a uno que te necesita como complemento. Hoy te digo que el Padre solo tiene a uno, digno para Su princesa.

Hoy te digo hermano, que al igual que al cordero se le concedió Su amada; existe una princesa para ti, digna de ser tu esposa.

No echemos a perder el diseño; olvidando la potestad que se le ha dado al hombre sobre la mujer y viceversa.

Ciertamente la esperanza de los hijos de Dios, no será defraudada, pues Él sabe lo que es esperar a Su amada.

Hoy te invito a levantar una oración y que ejerzas potestad sobre la única persona amada.

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