¡No Juzgues! – Enrique Monterroza
¡No Juzgues!
Días como hoy son los que me canso de ver y leer a tanta gente perfecta, y digo perfecta porque hoy en día abundan personas que lo saben todo, que son muy buenos para todo, que siempre tienen la opinión perfecta, que siempre saben cómo se tienen que hacer las cosas, que siempre encuentran un error en los demás, y que sobre todo son dueños de la verdad absoluta.
Es muy triste pero nosotros los cristianos a veces podemos llegar a ser las personas más despreciables del momento, porque decimos saberlo todo, porque decimos amar a Dios cuando ni siquiera somos capaces de amar al que está frente de nosotros porque simplemente no hace lo que nosotros quisiéramos que hiciera o porque simplemente no apoya lo que nosotros decimos.
Se nos hace tan fácil criticar, menospreciar, destruir, pero sobre todo pisotear al que se tropieza, pero se nos hace imposible extender una mano sin prejuicio alguno y aun mas imposible tratar de levantar y restaurar a aquel que fue despreciado por toda la comunidad.
¡Si Jesús caminara en estos tiempos por nuestras calles y visitara nuestras Iglesias!
(Ojo, lo hablo en sentido físico)
Y es que la reflexión de hoy es de esas que se te va ser difícil compartir, comentar o se te va hacer difícil terminar de leer, es de esas con las que no me hare popular (que por cierto no lo pretendo), pero es una de esas en donde personalmente estoy cansado de tanta injusticia e hipocresía.
¿Por qué somos así?, ¿Por qué somos tan duros y crueles con nosotros mismos?, ¿Acaso no jugamos para el mismo equipo?, ¿Acaso no tenemos todos un mismo objetivo? ¿No somos hijos de un mismo Padre? ¿No estaremos juntos por una eternidad?
A veces queremos hacer el trabajo que le corresponde a Dios, y menos mal que no somos Dios, porque si lo fuéramos ya hubiéramos enviado a muchos al puro infierno. Y es que somos tan profesionales para juzgar y decretar un juicio, pero somos tan lentos para verificar si lo que vemos o pensamos es lo que realmente sucede.
¿Cuándo te delego Dios para juzgar a tu hermano?, ¿En qué momento te otorgó el privilegio de enjuiciar a la persona con la que no compartes ideas o visión?
Si vemos que alguien tropieza o cae, somos los primeros en desaparecer de su círculo, somos los primeros en apártalo de lo “santo”, somos los primeros en olvidarnos que un día también nosotros necesitamos de una mano extendida que nos ayudara a restaurarnos.
Si alguien que era usado por Dios y que admirábamos humanamente hablando, comete un error, pareciera que todo lo que anteriormente hizo no valió la pena para nada y ahora se ha convertido en un derrotado y pecador empedernido, ¡Como que nosotros fuéramos tan perfectos y nunca falláramos!
A veces lo que nos falta es sinceridad y humildad para reconocer que nosotros a veces estamos hasta peor que algunos a quienes juzgamos, a veces nos sobra valor para juzgar y criticar, pero no somos lo suficientemente hombres (hablándolo en el sentido espiritual), como para reconocer que también tenemos muchas áreas en nuestra vida de las cuales no nos orgullecemos y que de salir a la luz nos avergonzarían.
¡Si Jesús viviera entre nosotros en este tiempo!
¿Sabes porque admiro a Jesús?, lo admiro porque se hizo hombre, viviendo entre nosotros, conociendo nuestro estado de primera mano y decidiendo morir por mí y por ti, pero también lo admiro porque nunca tuvo una palabra de juicio para los débiles, para los fracasados, para los que se les hacía difícil acercarse a Él. Jesús no juzgaba, Él perdonaba, Jesús no menospreciaba, Él les daba valor.
A los únicos que Jesús critica era a los que se creían tan bueno, a esos fariseos y escribas, a esos doctores de la ley que creían que eran superiores a todos por su vana religiosidad, a esos que se les era más fácil ponerles carga a los hombre y no llevarlas ellos mismos.
Esos que aparentaban lo que en realidad no vivían, esos que creían saber todo pero que en realidad no sabían nada, esos que tenían un manual de “santidad” muy diferente al que Jesús vino a enseñar, esos que se les hacía más fácil cerrar las puertas del perdón que perdonar. Esos que se les hacía más fácil menospreciar que aceptar. Esos que excluían en lugar de incluir.
A veces nos parecemos tanto a los fariseos que si Jesús viviera entre nosotros en estos tiempos no gritaría: “¡Sepulcros Blanqueados!”.
Yo me pregunto: Si Jesús viviera entre nosotros, ¿Seriamos capaces de juzgar y criticar como lo solemos hacer?, Si Jesús estuviera frente a nosotros, ¿Nos sería fácil pisotear al caído en lugar de levantarlo?, Si Jesús estuviera viéndonos frente a frente, ¿Seriamos capaces de poner tantas normas humanas olvidándonos de su gracia y misericordia? ¡Ay! Si Jesús estuviera frente a nosotros seriamos las ovejitas mas mansas que existieran. Pero como físicamente no lo vemos en lugar de ser ovejitas muchas veces nos convertimos en lobos que devoran a sus ovejas.
Discúlpenme pero no me puedo imaginar a Jesús criticando, menospreciando, dándole la espalda a los que tropiezan, no puedo imaginármelo pisoteando la mano del caído, no puedo imaginármelo echando a la gente de la Iglesia, no puedo imaginármelo poniéndole cargas a las personas que son difíciles de sobrellevar, ¡No! Lo siento, no puedo tener una imagen de Jesús diferente a lo que la Biblia nos enseña.
Personalmente no estoy de acuerdo a permitir cualquier cosa en las personas, pero no se puede obligar a las personas a no hacerlo, ese no es trabajo nuestro, ese es trabajo de Dios en la vida de cada uno, de hecho Pablo decía: “Todo me es licito, pero no todo me conviene”, Jesús lo dijo de esta forma: “Mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia y las demás cosas os vendrán por añadidura”.
Pero hay algo que Jesús dijo que es la base de todo lo que hoy quiero que reflexionemos y es lo siguiente:
“Algunos fariseos y maestros de la Ley comenzaron a hablar contra los discípulos de Jesús, y les dijeron: —¿Por qué comen ustedes con los cobradores de impuestos y con toda esta gente mala? Jesús les respondió: —Los que necesitan del médico son los enfermos, no los que están sanos. Yo vine a invitar a los pecadores para que regresen a Dios, no a los que se creen buenos”.
Lucas 5:30-32 (Traducción en lenguaje actual)
Esta es la clave: “Yo vine a invitar a los pecadores para que regresen a Dios, no a los que se creen buenos”.
Muchos oramos para que Dios nos haga que nos parezcamos a Jesús, de hecho el anhelo de muchos de nosotros es ser iguales a Jesús, pero no seremos igual a Él mientras no sintamos compasión por la gente, no seremos igual a Él mientras sigamos apedreando gente en lugar de perdonar, no seremos igual a Él mientras menospreciemos a los débiles y nos sintamos orgullosos de los “buenos”.
Cuando alguien se atreve a juzgar es porque se supone que tiene la suficiente autoridad moral y espiritual para hacerlo, sin embargo Jesús dijo:
“»¿Por qué te fijas en lo malo que hacen otros, y no te das cuenta de las muchas cosas malas que haces tú? Es como si te fijaras que en el ojo del otro hay una basurita, y no te dieras cuenta de que en tu ojo hay una rama. ¿Cómo te atreves a decirle a otro: “Déjame sacarte la basurita que tienes en el ojo”, si en tu ojo tienes una rama? ¡Hipócrita! Primero saca la rama que tienes en tu ojo, y así podrás ver bien para sacar la basurita que está en el ojo del otro.»”
Mateo 7:3-5 (Traducción en lenguaje actual)
¿Sabes? Yo sé de lo que te hablo, porque yo mismo hace unos años fui muy duro, me creí que casi era perfecto, juzgaba tan fácil al débil, llegue a menospreciar a los que no eran tan fuerte como yo (según mi ignorancia), era a veces muy cruel con el que tropezaba o caía, era un joven que tenía ideas equivocadas del amor de Dios y ahora me arrepiento de cómo llegue a ser, ahora que soy un adulto y madurado espiritualmente un poco más me doy cuenta lo que es realmente el amor de Dios, su misericordia, su gracia, la forma como cada día nos regala una oportunidad más para hacer mejor las cosas, me doy cuenta que la gente en lugar de rechazo quiere una mano extendida, me doy cuenta que es más fácil enseñarle a las personas del amor de Dios, porque estando enamorados de Dios nuestra vida tiene un cambio sobrenatural.
No tratemos de hacer el trabajo que le corresponde a Dios, Él es el único que puede juzgar y cuando lo hace su juicio es perfecto. No critiquemos, no menospreciemos, no nos creamos tan perfectos porque en realidad no lo somos, no pensemos que todos tienen que ser como nosotros, porque cada uno tiene una relación personal con Dios. No creamos que somos mejores que alguien, porque en realidad no somos mejores que nadie.
Vivamos cada día agradecidos porque Dios nos dio la oportunidad de ser sus hijos, si vemos a alguien que tropieza, extendámosle la mano, si alguien cae, levantémoslo, si alguien es débil, fortalézcamelo, si alguien falla, corrijámoslo con amor, mostremos lo que Dios nos ha dado a nosotros, ese amor tan puro con el que nos llamo, nos acepto, nos perdono y nos está restaurando.
Deja de criticar, menospreciar y creerte el más bueno de los buenos, porque no hay ninguno bueno sino solo Dios.
Jesús mismo nos hace esta invitación:
“No se conviertan en jueces de los demás, y así Dios no los juzgará a ustedes. Si son muy duros para juzgar a otras personas, Dios será igualmente duro con ustedes. Él los tratará como ustedes traten a los demás”.
Mateo 7:1-2 (Traducción en lenguaje actual)
Cuando nosotros en lugar de juzgar nos dedicamos a amar, a comprender, pero sobre todo a ayudar, nuestra vida cristiana se vuelve diferente, un gozo real inunda nuestra vida, toda amargura, enojo, resentimiento y todo sentimiento que nos lleva a juzgar desaparece, porque el amor de Dios estará inundando nuestra vida y es allí, y nada mas a allí cuando vamos a comenzar a disfrutar de lo que realmente es la vida en Cristo, una vida de amor verdadero hacia Dios y hacia nuestro prójimo.
¡No juzgues, ama!
Autor: Enrique Monterroza
Escrito originalmente para www.destellodesugloria.org
Autorizado para publicarse simultáneamente en: www.devocionaldiario.com – www.enriquemonterroza.com y http://reflexionesydevocionales.blogspot.com
Wow! Hermano Enrique! Es tan sencillo y lo hacemos tan difícil! Yo me siento muy identificada pues he estado durante 4 años asistiendo y sirviendo en la iglesia donde Dios nos había llamado en Tenerife; pero cierto Dia las cosascomenzaron a cambiar… Ya no había libertad del Espiritu Santo, no se sentía si presencia, se ve que poco a poco el enemigo había tomado parte de las vidas de la mayoría de “líderes” de la misma, se creían superiores a los demás a tal punto que una de ellas esta en planes de divorcio porque su esposo no quiere servir en la iglesia, cuando realmente no se da cuenta de que su tiempo esta dedicado de lleno a la iglesia (humanos), y ya no le dedica tiempo a su hogar! Es triste ver como el pueblo de Dios se aparta por personas así! Dios nos guarde de ser como los fariseos! Asistimos a una iglesia que se esta levantando (12 personas). Sera una bendición!!!
Que escrito, me llegó al alma. Pasé y he pasado por esta situación.Es muy dolorosa para ambas partes, para quien juzga y para el que es juzgado. Palabras muy alentadoras. Doy gracias a Dios por haber conocido este blog. Pido a Dios los siga bendiciendo para que continúen con esta labor tan maravillosa. Dios los bendiga.
me bendijo este devocional es hermoso DTB Y Siga usando :D
Estoy totalmente deacuerdo con lo que dices, porque eso es lo mismo que nos dice Jesus y nos dice Dios. Nadie es perfecto sino solo Dios. No hay porque juzgar a los demas porque nosotros tambien somos humanos y cometemos errores, y cuando lo hacemos tambien vamos a desear ser perdonados. Jesus mismo lo dijo: si nosotros no perdonamos a los demas sus faltas tampoco nuestro Padre nos perdonara las nuestras. Hay que hacer con los demas como nosotros quisieramos que hagan con nosotros. Si quisieramos parecernos mas a Jesus dederiamos amar en vez de juzgar. Muy buen devocional, me gusto muchos. Saludos!
Espectacular, hermosa palabra, hermosa reflección, quién juzga al prójimo estará dispuesto a subirse en sus zapatos?
Gracias a nuestro Divino Señor por mostrarnos de su amor. Enseñanos mas y mas cada día a apartarnos del mal e ir hacia tu cegadora luz, perdónanos por nuestra ignorancia y ayúdanos a perdonar a los que nos hayan tratado así. Ayúdales a ver la luz y que conjuntamente podamos ser para edificación y no para destrucción de tu cuerpo, que somos nosotros. En tu hijo amado. Amen.
Gracias por estas palabras. Es verdad que es mas facil buscar el error ajeno y juzgar que corregir nuestros propios errores y pecados. Muchas veces somos soberbios y nos creemos que porque conocimos a Cristo estamos por encima de los demas y no es asi, nosotros tenemos que ser el ejemplo, tenemos que ser luz en la oscuridad.
Estas palabras realmente me llegaron bien hondo y le pido a Dios que me inquiete por intermedio de su Santo Espiritu para que yo NO me convierta en alguien asi.
Gloria a Dios!
Dios los bendiga a todos.
Saludos desde Buenos Aires, Argentina.
Marcelo
Querido hermano, precisamente ayer comentaba con mi hermana (la mayor) que dificil es amar como el nos ama, vivir como el vivio en rectitud e integridad de corazon y de palabra, que en verdad la medida de la estatura del varon perfecto es muy alta, como los cielos, que no puedo comprender su capacidad, su santidad, su fidelidad, su inmenso amor. Porque la carne es debil, como dijo el Apostol Pablo, Oh miserable de mi quien me librara de este cuerpo de muerte! porque revestirnos de entrañable misericordia, bondad, humildad y paciencia, apenas viviendo en el Espiritu, pero en un instante nos bajamos de la gracia a la ley, sencillamente al manejar, al llegar algun lugar y que nos ganen lugar en la fila, al soltar la lengua sin compasion solo porque podemos hablar… Mi hermana me escribió: “Jesus! tu tarea en la cruz. Verdaderamente es duro, es un calvario,no se ven los golpes pero internamente cuesta dolores de muerte poner la palabra por obra a quien nos ha herido, humillado,no una vez, infinidad de veces,amo la escritura de 2Co.4 llevando la muerte de Jesus por todas partes. Y si nos cansamos y no proseguimos con la cruz, que enseñanza dariamos a nuestras hijas?.Por tanto, Dios, guárdanos, y guarda nuestra alma con diligencia, para que no olvidarnos de las cosas que nuestros ojos han visto, ni se aparten del corazón todos los días de nuestras vidas; antes bien, ayudanos a enseñarlas a nuestros hijos, y a los hijos de tus hijos con nuestra manera de vivir.
Justamente una prima mía en una red social estaba muy enojada porq habia en la Iglesia jovenes ”convertidos” q a pesar de ”convertirse” hacian aun cosas del mundo, las chicas se maquillaban, usaban pantalón, cambian de novio como si fuera ropa etc…etc…por eso ella estallaba en enojó, pero yo le dije que entonces algo andaba mal dentro de esa Iglesia, pero los demás la apoyaban decian ”amen” etc…etc…porq en vez de no se, de no alentar más su razón de enojó, no la corregian, yo no dije nada más porq entonces todos se me iban a hechar de encima y es justamente que a mi no me gusta ser hipocrita de ”seguirle la corriente”q me ha dejado de hablar, uno no es como ud lo dice, es q alguien comenta y todos estan de acuerdo, no hay disputas todos igual, todos con sus vidas perfectas, nadie, absolutamente nadie tiene problemas en su vida…entonces que es estó o q significa? Acaso seguir a Dios hace q uno tenga una vida perfecta sin problemas? q todos piensen igual y esten de acuerdo? no estoy diciendo q todos tengan riñas pero si un hermano esta en desacuerdo se supone q uno tiene q corregir al otro? como dice ud no menospreciar o juzgar a los recien convertidos..y como dice ud q ellos y nadie mas como ellos AMAN A DIOS, lo dicen todos los dias en sus redes sociales dicen versiculos de la biblia es decir lo gritan a los cuatro vientos….desde cuando acá, el ”cristiano” es aceptado por el mundo? acasó cuando vino Dios al mundo todos le daban la razón y lo seguian? entonces algo malo hay entre los cristianos y el mundo…
Gracias Hermano!
Estoy de acuerdo con usted en casi todo,,pero me es dificil aun distinguir entre esa delgada linea, de opinar al respecto y no caer en la critica, claro que he estado en ambos lados, y no me ha sido facil lidiar con este tipo de cosas,,resulta que a una persona que simpatizaba con la Iglesia a donde asisto me llamaba para desahogarse y demas,, un dia le dije que por favor dedicara tiempo a leer la Biblia, que no se conformara y buscara pasar tiempo con el Senor, y me dijo que pues no tenia tiempo, tuvo toda clase de excusas, amablemente le dije, bueno yo veo que tu siempre traes tu unas arregladas lo cual me llama la atencion pues se que tu al igual que yo limpiamos casas, pero veo que para traerlas asi es porque vas al salon y asi como encuentras tiempo para ir al salon creo que tambien puedes encontrar tiempo para estar a solas con Dios bueno resulta que ahora soy la “amiga” que critica, ella se dice convertida..pero creo que solo es convencida,,en fin hermano seguire adelante esforzandome en la Gracia como dice Pablo, y aprender como lidiar con estas situaciones que son el pan de cada dia,y que pues si Pablo le hablo de tal forma a la Iglesia de Corinto entonces es porque el si tenia suficiente autoridad moral espiritual, por supuesto que yo no creo alcanzarlo nunca mucho menos compararme con el, Dios siga Bendiciendo este Ministerio y les siga dando sabiduria de lo alto, con Amor en Cristo Jesus.
”Muito bom esta correção: porque a palavra de DEUS
corrige para que não julguemos o próximo para que
não viemos a sermos julgados, amém. !!!
G R E A T !!!!!! ASI SE HABLA GRACIAS!
si a veces nos endiosamos y con nuestra soberbia tratamos de humillar o subordinar despectivamente a los debiles, inexpertos, o persona que estan equivocadas en su vida o que van hacia el pecado, tratemos de reflexionar que tambien nosotros empezamos de cero con nuevas perspectiva de vida y aveces eso no lo entendemos.
Gracias a DIOS, gracias a Devocional Diario y Gracias al hermano Enrrique po esta reflexion,en los ultimos tiempos no he escuchado o leido algo como esto, me ha calado muy dentro de mi ser, Dios permita que esta semilla pueda germinar en mi y en todos los que verdaderamente seguimos o tratamos de seguir a CRISTO; Bendiciones hermanos
Amen,muy buena reflexion que todos debemos considerar ya que si somos muy buenos para juzgar a los demas,sin mirar nuestra propia vida que el mismo Jesus dijo que por cuntos todos pecamos estamos destituidos de la gloria de Dios(todos)solo somos salvos por su infinita misericordia y por su gracia,no por buenos,es impresionante hermanos en el ejercito de los estados unidos cuando un soldado cae en combate ni muerto ni erido se deja tirado es ley recogerlo y sin enbargo en el ejercito de Cristo a los eridos se les termina de rematar,busquemos mas a de nuestro Padre y de su amor e infinita misericordia para con los demas amen.
Muy buenas tardes, que verdad tan cierta.
Ahora mismo me siento muy mal porque mis jefes nunca tienen para conmigo una agradable respuesta, solo saben verme los errores en todo. Y muchas veces me molesto y caigo en la trampa de hablar y de juzgarlos, pero precisamente por eso me siento muy mal. por que se que no debo de hacerlo. Solo sé que necesito mejorar y aprender a ser mas tolerante y pedirle a Dios sabiduría para no dejarme influenciar por ellos de una manera negativa.Dios mio ayudame, en tus manos encomiendo mi boca, lengua y todo lo que soy, no quiero defraudarte, mucho menos desobedecerte. Perdóname Señor por todo lo que he dicho y por sentirme así.
He pasado por algo similar a lo que acabo de leer,no debemos de juzgar
sin antes tener la verdad en nuestra mente.Porque es muy doloroso y a
la ves te hacen mucho daño parar quien lo recibe,cuando no hay motivo
aun es mucho peor.Yo lo que puedo decir de mi boca es simplemente que
él Señor les perdone.
simplemente gracias